Una vez me dijeron que cuando trabajo con la harina y el agua se ilumina mi cara. Y me hace gracia pensar que estar haciendo un trabajo te puede cambiar la expresión de la cara. Siempre he tenido una buena relación con la masa y, desde hace algunos años, he empezado a elaborar pan ecológico como forma de ganarme la vida.

A menudo me preguntan dónde se puede encontrar mi pan pero, de momento, solamente lo hago bajo demanda y lo entrego directamente a algunos clientes –payeses, restaurantes, tiendas y algunas familias con hábitos ecológicos–.

El obrador donde hago el pan cuenta con espacio adecuado para realizar otras actividades. Tenemos la oportunidad de abrir tienda para vender directamente al público, lo que permitirá hacer el pan asequible a más gente.

Deseamos ofrecer un buen pan ecológico, sencillo, solo con los cuatro ingredientes básicos –harina, agua, fermento y sal–, horneado en un horno de mampostería caldeado con leña.

Queremos que el espacio no sea solo una tienda de venta de pan sino también un espacio para realizar talleres y compartir experiencias y recetas.

El aroma del pan auténtico

El cereal de cultivo ecológico (sin pesticidas), el agua sin cloro, la sal natural, la masa madre, las manos artesanas y el horno de piedra hacen que el pan tenga un aroma muy especial y único que nos transporta a los verdaderos hornos artesanos y nos recuerda el pan auténtico.

Hacer pan en silencio

Elaboro el pan en silencio, con todos los sentidos y con la mente ocupada solo en lo que estoy haciendo en cada instante, viviendo el momento presente. Lo hago de manera consciente –no de forma mecánica–, sin pensar en otras cosas. Hacer el pan –un alimento tan básico y ancestral– con plena atención me da la satisfacción de pensar que las personas que lo comerán lo disfrutarán, lo encontrarán sabroso y, en consecuencia, serán más felices.

No por el mero hecho de hacer el pan en silencio, el pa ha de salir perfecto. El motivo de hacerlo en silencio es estar muy pendiente de todo lo que está ocurriendo. Como en tantas otras cosas –trabajar en silencio, con la atención puesta en lo que se está haciendo–, ofrece muchas garantías de éxito, de hacer un buen trabajo y tener confianza en que el resultado será el más adecuado y más positivo.

El porqué de la tienda

Abrir una tienda al público tiene un sentido muy importante: el ciclo de elaboración del pan queda completado cuando llega a las personas que lo van a consumir.

Me he fijado que pocas veces conozco estas personas que comerán el pan que he elaborado. Por esto me hace una especial ilusión la idea de ofrecer el pan que he hecho durante la madrugada directamente a aquellos que se acerquen a la tienda.

Deseo ofrecer en la tienda un pan realmente artesano, elaborado en pequeñas cantidades. No quiero que cantidades elevadas desvirtúen completamente el concepto artesano.

El destino de las aportaciones

Todo el dinero obtenido de las aportaciones de los mecenas irá destinado íntegramente al acondicionamiento de la tienda y a los costes relacionados con la licencia municipal de apertura.

Si las aportaciones superan el objetivo inicial, dedicaremos esta cantidad adicional a la adquisición de un quemador de pellets para un caldeado del horno más sostenible con el medio ambiente.

El calendario

Los mecenas serán informados sobre la marcha del proyecto y recibirán las recompensas en la tienda de Vallgorguina durante las semanas siguientes a la finalización de la campaña de microdonaciones.

Las recompensas

Cada surtido está formada de 1 coca de pan (1 kg), 1 pan de payés de (1/2 kg), 2 baguettes (270 g unidad), 2 bases de pizza (290 g unidad), 3 panes de pita (110 g unidad). Se puede optar por harina blanca de trigo o integral.

La Jornada de puertas abiertas (aproximadamente 1h) consiste en una visita al obrador donde se incluirá una degustación de los productos allí elaborados.

El Taller de pan artesano ecológico (aproximadamente 3h) consiste en la elaboración de una masa polivalente que nos servirá para elaborar 4 o 5 especialidades diferentes (coca de pan, bases de pizzas, pan de pita…). También se incluirá una degustación de los productos allí elaborados.

La foto/placa de agradecimiento consiste en la exposición de un retrato o nombre del mecenas en una pared de la tienda con un mensaje de agradecimiento a estos mecenas.

El fin de semana en una casa rural para dos personas y dos noches, en una casa rural en Vallgorguina o alrededores del Montseny, según fecha y disponibilidad.

Importante: Los surtidos deberán ser recogidos por los mecenas directamente en la tienda de Vallgorguina.