Quién soy
Mi nombre es Gema López y nací en Lugo hace 29 años. Desde que tengo uso de razón, siempre he estado dibujando y pintando (pinté mi primer cuadro al óleo con 7 años).
He empezado a utilizado el arte como una herramienta con la que expresar lo que siento y eso se ha convertido poco a poco en una necesidad. Hoy por hoy, no concibo mi vida sin el arte. Es por ello que he decidido hacer de esto una forma de vida, cueste lo que cueste; primero estudiando Bellas Artes y después intentando hacerme un hueco en este mundillo.
Aunque he participado en multitud de exposiciones tanto individuales como colectivas desde hace 11 años, he sido seleccionada en certámenes y ganado premios de pintura, todavía me cuesta mantener unos ingresos estables debido a la falta de apoyos públicos y privados para mi sector (¿sabías que, normalmente, en una exposición el/la artista es el/la único/a que no cobra nada?).
Por eso, si te gusta lo que hago y quieres apoyar la creación joven, ¡te estaré eternamente agradecida si haces una aportación!
El proceso
Esta exposición engloba dos años de trabajo, ilusiones, dolor y esperanza. Han sido los años más moviditos de mi vida y mi obra ha cambiado mucho con respecto a mi trayectoria anterior. Han sido las dificultades económicas, profesionales, de salud y familiares las que me han hecho replantearme la forma de expresarme y el realismo fotográfico se me empezó a quedar corto. Me di cuenta de que había ciertas cosas que no se podían contar como siempre las había contado, sino que necesitaba derribar mis propios límites y atreverme, experimentar y probar lo que aún no sabía hacer, en lugar de quedarme anclada en lo que ya controlaba pero sólo contaba una parte de mi realidad.
Como decía, han sido unos años muy duros en el terreno personal y esta exposición habla de eso. Los filósofos existencialistas Sartre y Kierkeegard hablaron de la angustia existencial como esa sensación que se experimenta al salir de la zona de confort y verse solo/a ante el mundo, con sus peligros e incertidumbre. Dicen que es una consecuencia de la libertad, que sin ella no hay angustia, puesto que ahí donde ejercemos nuestro poder radica el desamparo. Sin embargo, siempre hay una parte que se va a escapar a nuestra voluntad.
En mi opinión, en el camino hacia la aceptación está la clave del vivir. El arte zen ilustra de manera magistral la oportunidad que hay detrás de la angustia existencial con su uso del vacío y el tratamiento escueto de la pintura, en el cual radica la consciencia del estar aquí y ahora y la aceptación de la realidad tal como es, incluyendo al uno mismo y a las propias acciones.
Mi proyecto
"El viento pasa a través de mí" trata de todo eso, además de ser una experiencia de sanación para mí y que pretende serlo para todo el/la que la vea.
En esta exposición se muestra al ser humano como un cuerpo en constante transformación, con sus similitudes con la naturaleza, y un alma llena de temores e incertidumbres, pero también de una inagotable fuerza interior.
Como artista, vuelco unos sentimientos y emociones en mis obras que me cuesta expresar de otra manera por varios motivos:
La primera es que no se pueden expresar con palabras, o por lo menos no de forma exacta; y el segundo es que creo que estas emociones son políticamente incorrectas, silenciadas por la sociedad y demasiado contradictorias para sacarlas al terreno público.
A través de mi obra plástica, pretendo crear un espacio de libertad para el individuo en el que no se sienta juzgado, sino acogido en su complejidad, con sus luces y sus sombras. Creo que a pesar de ser un trabajo, en su mayor parte, autobiográfico e íntimo (o precisamente por eso) puede ayudar a muchas personas al darles un espejo en el cual mirarse, una identificación. Este es precisamente mi objetivo desde que comencé en el arte.
Para abrir boca, os dejo un vídeo que preparé en el que se ve el proceso de uno de los cuadros:
A qué destinaré vuestras aportaciones
Vuestras aportaciones como mecenas irán destinadas a sufragar los gastos que he tenido en la preparación de esta exposición (materiales, producción, etc) y los que me quedan para completarla.
Sobre las recompensas
Las recompensas son un agradecimiento a vuestras ayudas desinteresadas y generosas. Pretendo que os llevéis un recuerdo de esta exposición que hacemos entre todos/as y que también os sintáis obsequiados por mí.
Así, además del material que recibiréis de la exposición en vuestra casa, tenéis una serie de regalos dependiendo de la aportación.
Con 30€ os llevaréis este calendario 2017, con imágenes de las obras y diseñado por mí:
Con 50€, haré un retrato para cada uno/a de vosotros/as:
Con 100€, os invitaré a una visita guiada a mi estudio y a la exposición antes de que esta abra al público. Además, un retrato mucho más elaborado y detallado será vuestro:
Con 500€, podréis escoger una obra anterior a esta exposición en mi estudio cuyo P.V.P. no supere los 600€ (100€ de regalo) y, además, tendréis importantes descuentos en todo lo demás. Por si esto fuera poco, apareceréis como coproductores de la muestra en todo el material promocional.
Calendario previsto
El proyecto ya se está elaborando actualmente (lleva germinando desde 2015) y será presentado en la galería de arte Iskoö (Lugo) el 21 de abril de este año, donde estará 5 semanas.
Las recompensas (hasta 50€) serán entregadas en el plazo de un mes desde la inauguración de la exposición y las de 100€ para arriba, en un plazo de 3 meses máximo.
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