Y más allá monstruos.

Si has llegado hasta aquí, muy probablemente ya nos conoces. En cualquier caso, esto es internet, el distrito federal del quién sabe, así que sigamos el protocolo. Billy Bob Dillon fue un grupo de rock instrumental con vocación psicodélica formado en Madrid en 2007. Utilizamos el pretérito perfecto simple porque, efectivamente, hemos decidido celebrar nuestro décimo aniversario separándonos. :)

Como grupo, nuestro modus operandi siempre rozó lo enfermizo. Obsesión por el detalle, autoexigencia a las puertas del sadismo y un empeño por hacer las cosas en nuestros propios términos que desde muy pronto nos abocó a unos niveles de productividad paupérrimos. Un ejemplo perfecto de todo eso es la historia de este disco con el que pretendemos despedirnos para dejar constancia de que algún día existimos, y que a continuación intentaremos relatar de manera breve.

El proyecto.

El disco se titula “Y más allá monstruos”, lo componen siete piezas instrumentales que suman un total de 50 minutos y su proceso de creación ha sido íntegramente autogestionado por el grupo.

La grabación tuvo lugar a lo largo de una semana en una casa de la sierra madrileña que alquilamos para la ocasión -accidentalmente junto a la de Coque Malla- allá por el verano de 2012. Lo grabó Óscar Hidalgo, que vino amablemente desde Londres cargado de equipo, y también co-produjo los temas junto con el grupo. Durante todos esos días Manu Gaviño nos hizo de comer, algo por lo que le estaremos eternamente agradecidos.

No mucho después de grabar el disco nos quedamos sin batería por tercera vez. Acordamos que no sacaríamos el disco hasta que no pudiéramos tocarlo en directo, lo que colocó el proyecto en una pausa indefinida de duración incierta.

Después de algunos intentos esporádicos e incompletos salpicados a lo largo muchos meses, en febrero de 2014 el grupo se desplazó hasta Londres para terminar de montar el disco -que fue grabado por pistas- y mezclarlo en el estudio de Óscar, Psycho Studios. De vuelta en Madrid, grabamos algunas pistas adicionales en La Reserva y rematamos la mezcla.

En 2015 la obra quedó terminada en lo musical con la masterización, realizada por Pedro Viñuela en Nexo 101 (San Martín de Valdeiglesias). Y en 2016 se cerró el disco en su conjunto con el diseño de las cubiertas, desarrolladas por nuestro bajista, ilustrador que firma bajo el pseudónimo Wearbeard.

El disco.

Si todo esto sale bien, será un disco doble en vinilo de 140 gramos. Uno en negro y otro en blanco, con las fundas en el color opuesto. La carpeta que contendrá ambos discos será simple, esto es, tendrá únicamente una portada y una contraportada, y llevará un lomo extendido de mayor tamaño para que quepan dos discos en vez de uno.

Los discos serán prensados en una de las fábricas más respetadas del mundo, situada en Holanda, que imprimirá también las carpetas. Blanco y negro, todo en blanco y negro.

Esto que hay aquí abajo es Quién pone nombre a los huracanes, el tema que abre el disco.

Entonces, si lo compro, ¿cuándo lo tendré?

Como acabamos de desgranar, está todo hecho, salvo prensar los discos. La producción de vinilo es un proceso delicado y laborioso, a lo que se suma que es una especie de arte en peligro de extinción que practica ya muy poca gente en el mundo. Por ese motivo, los plazos de entrega de las fábricas oscilan bastante en función de la carga de trabajo que tengan en cada momento, y una producción pequeña (en cantidad) como la nuestra siempre estará a expensas de otros proyectos más cuantiosos. Por todo esto, en el mundo discográfico se considera razonable contar con un plazo de entre 1 y 2 meses desde el momento en el que envías el disco a fábrica y cuando te llega a casa oliendo a producto químico. Pongamos un par de semanas más para organizar las entregas y enviar por correo lo que no pueda ser dado en mano; lo tendrías en tres meses contando a partir del momento en el que acabase -con éxito- esta campaña, curándonos en salud.

Gracias a todos,

Puño!

Billy Bob Dillon

Otros proyectos de Billy Bob Dillon: