"THIS IS SKA" 60 piezas de puro ska
El libro de música jamaicana consta de 60 partituras inéditas.
En un principio todas las partituras estan para instrumentos en tonalidad de C (Do).
Algunos de los temas que incluiré en el libro:
-Ball Of Fire (Roland Alphonso)
-China Town (Don Drummond)
-Freedom Sounds (Tommy Mc Cook)
-Garden Of Love (Don Drummond)
-Guns of Navarone (Roland Alphonso & Ths Skatalites)
El libro tendra tapa blanda, y aquí debajo os dejo el maravilloso prologo escrito por David “Dr. Decker” Vilches
SKA. El nacimiento de una leyenda.
Mucho se ha hablado, en los últimos años, del ska original y la música jamaicana en general. Pero hasta ahora nadie había tenido la brillante idea de transcribir al lenguaje musical aquellas piezas que han llegado a nosotros comprimidas en el surco de incunables discos de vinilo.
Este libro cubre un espacio que nadie se había encargado de llenar.
Con él, los músicos de nuestros días podrán reproducir e interpretar los sones de aquellos años difíciles pero gloriosos en que la música jamaicana entró en la modernidad activando una industria discográfica que no ha dejado de funcionar a pleno pulmón hasta la actualidad.
Jamaica es una pequeña isla del Caribe azotada por piratas y huracanes, por la corrupción y la deuda externa, por la violencia y la necesidad compulsiva de hacer música. En los arduos años que siguieron a la Segunda Guerra Mundial, permanecía bajo el yugo colonial del Imperio Británico, y la población subsistía a duras penas en medio de la pobreza y la falta de oportunidades. La música era, para ellos, el mejor de los bálsamos. Y no es que tuvieran capacidad económica para comprar discos.
La música llegaba a través de emisoras norteamericanas en forma de un sabroso menú de rhythm’n’blues, stándares, jazz, música latina y bandas sonoras de películas.
Los sound system eran discotecas móviles genuinamente jamaicanas que emitían ese mismo menú en bailes al aire libre donde el negocio era la venta de alcohol pero donde la auténtica protagonista era la música.
En aquellos bailes los sound system competían entre sí a la hora de pinchar el disco más bailado o más coreado, y buscaban la exclusividad de su repertorio arrancando la etiqueta de los discos que ocasionales viajeros habían traído desde Miami o New Orleans. Roscoe Gordon, Louis Jordan, Nat King Cole o Fats Domino estaban a la orden del día.
Don Drummond - Chinatown
Los primeros sound system datan de las décadas de los 40 y los 50, y entre ellos podemos citar a Sir Coxsone The Downbeat, Duke Reid The Trojan, Tom The Great Sebastian, V-Rocket o Lord Koos.
En su búsqueda de lo más impactante y novedoso, los propietarios de los sounds pronto vieron la necesidad de generar su propia música, reinterpretando de forma genial los sonidos foráneos que hasta entonces habían estado consumiendo. Los encargados de crear la música de la incipiente industria discográfica jamaicana fueron un puñado de músicos de sesión a los que nadie reconocería su valía hasta pasadas varias décadas:
Ernest Ranglin (guitarra), Cecil Lloyd o Theophilus Beckford (piano), Val Bennett o Roland Alphonso (saxo alto), Cluett Johnson (bajo), Don Drummond (trombón)…
Muchos de ellos provenían de los guetos más deprimidos, pero habían recibido una remarcable educación musical en la Alpha Boys School, una institución para niños huérfanos o en precaria situación regentada por las Hermanas de la Caridad.
Algunos, como el genial trombonista Don Drummond fue alumno de aquella escuela y llegó a ser uno de sus profesores, instruyendo a otros en las virtudes musicales. Es el caso de Emmanuel Rico Rodriguez, otro de los pioneros, que se reconoce fuertemente influido por Drummond.
Los alumnos más destacados alternaban o proseguían su carrera musical en orquestas y big bands como las de Eric Dean o Mapletoft Poulle.
También fue importante la influencia del mento, una música autóctona de raíces rurales que a menudo se había confundido con el calypso. Lo sincopado de su ritmo contaminó el blues que aquellos músicos empezaron a crear en estudios como el Federal Recording Studio o las dependencias de emisoras radiofónicas locales como la JBC (Jamaican Broadcasting Corporation) o la RJR (Radio Jamaica Redifusion), que a menudo eran utilizadas como estudios de grabación.
En la producción habían sido pioneros personajes como Stanley Motta, que abrió uno de los primeros estudios de grabación en 1951 en Hanover Street, y Ken Khouri, propietario de Federal, otro de los primeros estudios y sin duda el más utilizado a la hora de grabar ska.
También Ivan Chin y Dada Tuari. Todos ellos habían estado produciendo mento, blues, boogie y otras hierbas que, poco a poco, iban conformando esa amalgama tropical con alma de blues que acabaría convirtiéndose en ska hacia 1962.
En el proceso, el contratiempo se había ido marcando en el segundo y cuarto compases, a diferencia del rhythm’n’blues estadounidense. Esa síncopa estaba fuertemente marcada por el stacatto de la guitarra, el piano o incluso los vientos cuando asumían roles rítmicos.
Coxsone Dodd, Duke Reid, Prince Buster, King Edwards, Lloyd “Matador” Daley, Vincent “Randys” Chin, Leslie Kong o Lyndon Pottinger, constituyeron pronto la primera división de productores del naciente ritmo, que se asoció de manera automática a la independencia que Jamaica consiguió frente a la Corona Británica el 6 de agosto de 1962.
Fue un momento de gran euforia, si bien la historia demostró que poco o nada iban a cambiar las cosas para los jamaicanos de a pie. Los estudios de grabación empezaron a funcionar a pleno rendimiento.
El ska era una especie de fiebre, y para cada sesión se utilizaban los músicos disponibles en aquel momento: Thomas “Tommy” McCook, Roland Alphonso (saxo tenor), Lester Sterling (saxo alto), Johnny “Dizzy” Moore, Oswald “Baba” Brooks, Raymond Harper, Frank Anderson (trompeta), Don Drummond*, *Rico Rodriguez, Ron Wilson (trombón), Ernest Ranglin, “Jah” Jerry (guitarra), Jackie Mittoo, Theo Beckford, Gladstone Anderson (piano), Lloyd Knibb, Arkland “Drumbago” Parks, Carl McLeod, Aston “Wackie” Henry (batería), Lloyd Brevette (contrabajo) y otros.
Don Drummond - Down Beat Alley
Aquellos músicos acompañaron a todos los grandes cantantes de ska: Laurel Aitken, The Wailers, Toots & The Maytals, Justin Hinds & The Dominoes, Lord Creator, Shenley Duffus, Delroy Wilson, Lord Tanamo, Jackie Opel, Millie Small, Derrick Morgan, Desmond Dekker…
Y en sus maratonianas sesiones de grabación todavía les quedaba tiempo para abordar cortes instrumentales en los cuales podían dedicarse, a placer, a las incursiones jazzísticas que tanto les gustaban.
Los temas resultantes de aquellas grabaciones eran acreditados al líder del grupo en aquellos momentos o al productor que financiaba las sesiones, aunque también había formaciones que funcionaban como tales con regularidad, como Kes Chin & The Souvenirs, Byron Lee & The Dragonaires, Baba Brooks Band, The Vikings, Carlos Malcolm & His Afro Jamaican Rhythms, Los Caballeros Orchestra…
Pero entre todas ellas, The Skatalites pueden ser considerados la super banda del género y al mismo tiempo su esencia más pura. Su formación más clásica estaba constituída por McCook, Alphonso, Sterling, Drummond, Moore, Mittoo, Knibb, Brevette y “Jah” Jerry, aunque no era raro que Ranglin fuera reclutado en más de una ocasión. Doreen Shaeffer o Lord Tanamo eran alguno de sus vocalistas más habituales cuando hacían su propio show en diversos clubs de Kingston o de alguna otra de las principales localidades de la isla.
Los emigrantes jamaicanos llevaron su música con ellos hacia el Reino Unido, la zona angloparlante de Canadá y los Estados Unidos. También las islas vecinas a Jamaica recibieron su influencia, y pronto el mundo entero se hizo consciente de ese blues sincopado que se quiso exportar como el nuevo baile de moda. Pero el ska fue mucho más que eso; el primer ritmo de la Jamaica independiente y el sonido con el que nació la industria discográfica de la isla.
También fue la antesala del rock steady y el reggae, y la música que vehiculizó el orgullo de los jamaicanos y sus perspectivas de proyectarse y mejorar su calidad de vida. Un fabuloso banco de pruebas donde la isla con mayor porcentage de población dedicada, de una manera u otra, a la música, echó a andar con paso firme.
El ska tuvo una corta vida, puesto que hacia 1966 empezó a mutar en un ritmo más relajado donde las “notas sueltas” del contrabajo (a la manera del blues) empezaron a enlazarse para formar una línea de bajo que sería la columna vertebral del reggae años más tarde. Había nacido el rock steady; pero esa es otra historia.
David “Dr. Decker” Vilches
Don Cosmic - A Good Year
Autor
Josep Blanes - Trombón de varas (Conservatorio de Badalona y Conservatorio Oscar Plá (Alicante) Clasico, Composición y arreglos con Sergi Vergés (Profesor del Conservatorio Superior del Liceo) y Lluís Vergés (Profesor del Conservatorio Superior ESMUC). Recorrido musical: Manu Chao, Fermin Muguruza, Green Valley, Tromboranga, Fundación Tony Manero, La Kinky Beat, Zulú 9.30, Don Cosmic, La Pegatina, Señor Wilson, Adala, Rampalion, Alex Bass, Roe Delgado...
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Calendario
Nada mas lleguemos al objetivo, el libro se enviará a fabrica para ser imprimido.
Como muy tarde a mediados de Septiembre empezaremos a enviar los pedidos.
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10 comentarios
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Joan Humet
Gran projecte!! Felicitats i espero amb candeletes el llibre!!!
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upful!
Kasy One
Palante! :)
Marcos
Bon treball....
Klikli
Vinga ixos molinillooooooosssssss!!!
Guillem
Felicitats sou uns cracks!
Dievushki
Endavant amb aquest projecte tan especial!
Alex Badalonians
Gran Pepe! More Ska!
paupa
💚
juanka
Encantat!!